Control del
Chancro del castaño
Cryphonectria parasitica es el hongo responsable de la enfermedad conocida como chancro del castaño. En la actualidad, afecta a todas las masas de castaño europeo (Castanea sativa) del norte peninsular.
Este hongo penetra a través de heridas abiertas en el árbol (poda, grietas, cicatrices…), permanece en la madera muerta y es muy resistente al frío y a las condiciones adversas. Está considerada como la enfermedad más grave del castaño a nivel mundial, no en vano aparece recogida en la legislación, tanto europea como española, como enfermedad de cuarentena debido a su agresividad, ya que coloniza muy rápido al huésped.
Síntomas de la plaga
Daños y elementos de diagnóstico
1 .
Corteza en tonalidades rojizas e hinchada
Corteza fisurada en las partes centrales del chancro
2 .
3 .
Pústulas rojo-anaranjadas sobre la parte de la corteza afectada
Micelio blanco en forma de abanico debajo de la parte externa de la corteza
4 .
5 .
Rebrotes debajo de la infección, más visibles en verano por el desarrollo del follaje
Hojas o ramas secas pertenecientes a la parte infectada del tronco y que sobresalen de pies frondosos en verano
6 .
Ciclo de la enfermedad
1. PENETRACIÓN
El proceso de infección de C. parasitica comienza al penetrar las esporas en la corteza de castaño a través de aberturas naturales o heridas. El hongo es incapaz de infectar tejidos sanos, por lo que sólo penetra en aquellos castaños que tengan heridas de podas, grietas o cicatrices.
2. INFECCIÓN
El hongo invade la zona subcortical, degradando los tejidos y oprimiendo los conductos de savia y agua hacia las partes altas del árbol. Por lo tanto, el primer síntoma será el enrojecimiento y ligero abultamiento de la corteza, más patente en pies de corta edad con cortezas más lisas.
3. SÍNTOMAS
Provoca grietas y hendiduras longitudinales en la zona afectada, el marchitamiento de hojas y ramas, un decaimiento general del árbol y formación de brotes de yemas largamente dormidas justo debajo del chancro.
4. SECA Y MUERTE
La parte afectada de la planta sufre un proceso de necrosis, que se detecta por la aparición de ramas secas a partir de la lesión. Progresivamente, los chancros van aumentando de tamaño y rodeando a ramas y troncos. Cuando esto sucede, los tejidos vegetales situados por encima de la lesión terminan por morir.
5. DISPERSIÓN
El principal agente de propagación de C. parasitica es el viento, que puede transportar las ascosporas a gran distancia. Los conidios, sin embargo, no presentan dispersión aérea, al estar englobados en una sustancia viscosa, y son transportados por la lluvia o en las patas, plumas, pelo, etc., de pequeños animales e insectos.
Métodos de control
En la actualidad no existe ningún método de control cultural o químico que sea eficaz, ni hay ningún cultivar o híbrido de castaño tolerante o resistente a la enfermedad.
En el año 1953, Biraghi descubrió la existencia, por primera vez en Italia, de cepas no patógenas de C. parasitica que provocaban la cicatrización espontánea de las lesiones o chancros. En el año 1965, Grente comprobó que esas cepas, denominadas hipovirulentas, no solo eran menos patógenas que las cepas normales virulentas, sino que además podían transmitir su efecto a las virulentas.
La hipovirulencia se define como una atenuación de la virulencia del patógeno provocada por la infección del hongo por un virus de ARN de doble cadena que se transmite por anastomosis hifales y conidias, siendo el virus responsable de la hipovirulencia en Europa el denominado CHV1 (Cryphonectria hypovirus 1).
Evaluación de la transmisión del hipovirus CHV1 mediante cultivos duales: en las placas de la izquierda no se transmitió el hipovirus a las cepas patógenas, mientras que en las de la derecha sí que se logró una correcta transmisión del mismo.
Medidas preventivas
DIVULGACIÓN para conocer los procesos infectivos del hongo y evitar así su propagación.
HIGIENE EN LABORES SILVÍCOLAS: DESINFECTAR todos los instrumentos de corte con lejía o alcohol al 50%-70%.
HACER CORTES LIMPIOS de poda y recepes que permitan la evacuación del agua de lluvia.
SELLAR LAS HERIDAS, siempre que sea posible, con productos tipo «mastic» con acción fungicida.
QUEMAR LOS RESTOS de cortas, podas, etc., en especial cuando se sospeche que haya infección del hongo y hacerlo lejos del árbol para no dañarlo y favorecer la entrada de la enfermedad.
En Galicia hay registrados ocho tipos de poblaciones de Cryphonectria parasitica virulentas causantes de enfermedad, de las cuales tres poblaciones son las que originan el 80% de los chancros gallegos. Para que el control biológico funcione con éxito, se recomienda usar cepas hipovirulentas localizadas en la misma zona donde se aplica el control.
Basándonos en este proceso natural se ha desarrollado un método de control biológico para el tratamiento del chancro que consiste en la inoculación de cepas hipovirulentas en los árboles que presentan cepas virulentas causantes de enfermedad. Esta inoculación se realiza mediante la aplicación de un gel que contiene cepas hipovirulentas compatibles con las poblaciones del hongo causantes de la enfermedad en Galicia.
